Declaran estado de
emergencia. Tres mil bomberos combaten las llamas a los que se han unido 372
bomberos mexicanos.
Jose Rafael Sosa
ALBERTA, Calgary. La provincia canadiense de Columbia Británica, al extremo oeste del país, declaró estado de emergencia ante los más de 560
incendios forestales que siguen consumiendo los bosques y amenazan a las
poblaciones aledañas, indican los reportes de los medios canadienses y agencias
de noticias.
El
ministro de seguridad pública de la provincia, Mike Farnworth dijo Este es un paso progresivo en nuestra
respuesta a los incendios forestales para asegurarnos de que Columbia Británica
tenga acceso a todos los recursos necesarios”.
El estado de
emergencia estará vigente por los próximos 14 días y se extenderá según la
situación. Preocupa la calidad de aire que se respira en el norte
de la provincia en la costa del Pacífico donde se ha extendido el humo de los
incendios.
El humo llega a
localidades como Alberta y su ciudad Calgary, entre otras, a 726 kilómetros de distancia, lo
que ha reducido la salida al aire libre de sus moradores, por la toxicidad ambiental.
Tres mil bomberos
canadienses y voluntarios especializados están integrados al combate de los
incendios, con apoyo de aviones tanqueros que arrojan agua sobre las llamas.
Ayer se informó que
372 bomberos mexicanos coordinados por
la Comisión Nacional Forestal (Conafor) han venido a Canadá a combatir las llamas, las que se han incrementado debido a las
condiciones climáticas secas y a las elevadas temperaturas del verano.
Con el avance de
los incendios forestales en los bosques de Columbia Británica, el gobierno
provincial ha ordenado evacuaciones en las regiones norte y centro.
En el distrito
regional de Bulkley Nechako, al oeste de Prince George, tiene algunos de los
incendios forestales más grandes de la provincia, se firmaron tres nuevas
órdenes de evacuación.
El alcalde de la
localidad de Fraser Lake, Dwayne Lindstrom, refirió que ayer se registró uno de
los días más difíciles con la concentración de humo en la atmósfera, con un
cielo “negro” a las 15:30 del día.
La cifra total de
desplazados a 37.000 desde que comenzó la catástrofe hace más de una semana.
Las llamas, alimentadas por fuertes vientos, forzaron a las autoridades
a tomar nuevas medidas de evacuación: la principal afectó a la ciudad de
Williams Lake, que tiene una población de 11.000 habitantes.
Las órdenes de evacuación, anunciadas el sábado en la noche,
involucraron a un total de 24.000 personas en la región, de acuerdo a la cadena
pública CBC.
La mayoría de los evacuados se dirigieron al pueblo de Kamloops, al sur
de Williams Lake, que comenzaba a tener dificultades para acogerlos.
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