Por Dante Valenzuela
Por qué nuestra admiracción? Por el pequeño mensaje que envió al pueblo dominicano en el fin de año. Comenzó citando la palabra de Dios expresada por el salmista cuando aseguró que si Dios no edifica la casa, en vano trabajan los edificadores. Él está convencido que sin Dios no se puede hacer un buen gobierno, no hay patria ni libertad, y que todo esfuerzo humano es en vano.
Reconoce el aporte espiritual a la República Dominicana de los pastores Molina Rosario a través de la Batalla de la Fe.
Reconoce que solo la palabra de Dios liberta al cautivo por el diablo e insta a los pastores y líderes a continuar llevando la palabra de Jehova a todos los rincones de la tierra.
Reconoce la soberanía de Dios sobre la República Dominicana, por ende, confía en él y solicita la oración por los funcionarios, los que humanamente gobiernan nuestro país.
Estas expresiones del presidente, nos indica que tenemos un presidente creyente en Dios, que confía en él, y esto nos asegura, que la República Dominicana es territorio de Dios, y Dios nos ayudará a salir en victoria frente a esta pandemia y situación económica que nos encontramos.
Dios bendiga a nuestro presidente y su familia, Dios bendiga a todo el pueblo dominicano.
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