
Lo natural es que las empresas compitan por tu preferencia.
Esto las lleva a dar mƔs, a reducir precios y a mejorar la calidad de sus productos.
Pero a veces, un grupo de ellas cree que es mÔs cómodo no hacerlo.
Acuerdan fijar un precio o dividirse los clientes por territorio y no competir.
ObligƔndote a comprar el producto que ellos quieren y al precio que eligen.
Esto se llama prƔctica concertada y es ilegal.
Da una ventaja competitiva injusta a quienes la practican y perjudica a los consumidores, que son ciudadanos con derecho a consumir sin ser engaƱados.
La competencia justa nos conviene a todos y a todas.
¡DefendĆ”mosla!
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