La casa de Matías Ramón Mella convertida en un taller de refrigeración

Por Juandy Gómez
Correo: juandy.gomez@yahoo.com

Mientras el Gobierno Central anunciaba con algarabía  los actos conmemorativos del 201 aniversario del natalicio de Matías Ramón Mella, resulta paradójico que la que fuera la residencia del heroico hombre del trabucazo esté sumida en el abandono y convertida en un taller de refrigeración. La casa está en la calle Cuba esquina 16 de Agosto del centro histórico de la ciudad de Santiago de los Caballeros.

Así lo muestran las imágenes que dan cuenta de la indiferencia del Ministerio de Cultura, institución que debería de hacer de esta casa histórica, un museo que resalte la vida y valores del patricio, que permita a estudiantes hacer un recorrido obligado para mantener fresca la memoria de tan insigne hombre.

Preocupa que en el frente de la vivienda del padre de la patria los lugareños hayan improvisado un pequeño vertedero que no se ha logrado detener de la manera más amable posible, por lo que alguien se vio en la necesidad de colocar un letrero que reza: “Atención vecinos depositar su basura solo en fundas plásticas”.

Dicho letrero desdeña la tarja colocada el 25 de febrero 2010 por la Gobernación Provincial de Santiago en conjunto con la Comisión de Efemérides Patrias que dice: “En este lugar estuvo la casa donde vivió y murió el General Matías Ramón Mella, Vicepresidente del Gobierno Restaurador. El 7 de marzo de 1864 recibió aquí la visita de Juan Pablo Duarte. Ambos héroes se dieron un último abrazo fraternal y revolucionario. El General Mella falleció el 4 de junio de 1864”.

En el Proyecto de Presupuesto General de la Nación para el 2017 al Ministerio de Cultura se le asignó 2, 241, 271,472 millones de pesos. De modo que cada mes esta institución maneja alrededor de 200 millones de pesos que les permitiría invertir en la reparación y remozamiento de esta vivienda.

Esta casa podría atraer a turistas y estudiantes permitiéndoseles la oportunidad de vestirse con las indumentarias de la época victoriana y tomarse fotografías. Leer cartas y anécdotas de la vida del patricio. Pero tal parece que este no es el sentir de las autoridades del Ministerio de Cultura hasta el momento.