El papa pidiĆ³ a Dios demuestre su poder y arroje al fuego las varas del opresor y haga que la paz venza en este mundo amenazado por la violencia


El Papa Benedicto XVI oficiĆ³ la noche del pasado sĆ”bado la tradicional Misa del Gallo en la que pidiĆ³ a Dios que "demuestre su poder" y arroje al fuego "las varas del opresor, las tĆŗnicas llenas de sangre y la botas de los soldados" y haga que la paz venza en este mundo, amenazado por la violencia.
Por tercer aƱo consecutivo la Misa del Gallo se celebrĆ³ a las diez de la noche local (21.00 gmt) y no a medianoche, para evitar fatigas al pontĆ­fice, que tiene casi 85 aƱos, y maƱana, Navidad, volverĆ” de nuevo a la basĆ­lica de San Pedro para pronunciar el Mensaje de Navidad e impartir la bendiciĆ³n "Urbi et Orbi", a la ciudad de Roma y a todo el mundo.

Benedicto XVI llegĆ³ al templo en la peana mĆ³vil que ya utilizĆ³ los pasados meses para desplazarse por la larga basĆ­lica de San Pedro para evitar esfuerzos fĆ­sicos.



Mirando una imagen del NiƱo reciĆ©n nacido, el anciano pontĆ­fice dijo que la Navidad es la manifestaciĆ³n de Dios, que se ha manifestado como nino para oponerse a toda violencia y llevar un mensaje de paz.



"En este momento en que el mundo estĆ” constantemente amenazado por la violencia en muchos lugares y de diversas maneras, en el que siempre hay de nuevo varas del opresor y tĆŗnicas ensangrentadas, clamemos al SeƱor: TĆŗ, el Dios poderoso, has venido como niƱo y te has mostrado a nosotros como el que nos ama y mediante el cual el amor vencerĆ”", afirmĆ³ el papa.



Benedicto XVI aƱadiĆ³ que los hombres deben ser constructores de paz y asegurĆ³ que sufren porque la violencia continĆŗa en el mundo.



"Por esos te rogamos: Demuestra tu poder, ¡oh Dios! En este nuestro tiempo, en este mundo nuestro, haz que las varas del opresor, las tĆŗnicas llenas de sangre y las botas estrepitosas de los soldados sean arrojadas al fuego, de manera que tu paz venza en este mundo nuestro", implorĆ³.



En una homilĆ­a que la clamĆ³ por la paz en varias ocasiones, el papa Ratzinger seƱalĆ³ que Cristo naciĆ³ en un establo de BelĆ©n "y no en los palacios de los reyes", lo que demuestra la humildad de Dios, que se hizo pobre.



El Obispo de Roma manifestĆ³ que la Navidad se ha convertido en un una "fiesta del comercio" cuyas luce esconden el misterio de la humildad de Dios, que nos invita a la humildad y a la sencillez.



"Pidamos al SeƱor que nos ayude a atravesar con la mirada las fachadas deslumbrantes de este tiempo hasta encontrar detrƔs de ellos al niƱo en el establo de BelƩn para descubrir asƭ la verdadera alegrƭa y la verdadera luz".



El papa se refiriĆ³ tambiĆ©n a la iglesia de la Natividad de BelĆ©n, que se alza en el lugar donde naciĆ³ JesĆŗs, y dijo que de la puerta de entrada, que en un principio tenĆ­a cinco metros y medio de alta, sĆ³lo ha quedado una abertura de un metro y medio y hay que agacharse para entrar.



Aunque esa reducciĆ³n pudo ser para protegerla mejor de eventuales asaltos y evitar que entraran a caballo, tiene un significado mĆ”s profundos y es que quien desea entrar en el lugar del nacimiento de JesĆŗs, tiene que inclinarse.



"Si queremos encontrar al Dios que ha aparecido como niƱo, hemos de apearnos del caballo de nuestra razĆ³n 'ilustrada'. Debemos deponer nuestras falsas certezas, nuestra soberbia intelectual, que nos impide percibir su proximidad. Hemos de seguir el camino de San Francisco, que es la extrema sencillez exterior e interior que hace al corazĆ³n capaz de ver".



El papa exhortĆ³ a los fieles a celebrar la Navidad renunciando a la obsesiĆ³n "por lo que es material, mensurable y tangible" y pidiĆ³ por todos aquellos que tienen que vivir la Navidad en la pobreza, en el dolor, en la condiciĆ³n de emigrantes, para que aparezca ante ellos un rayo de la bondad de Dios".



La Misa del Gallo comenzĆ³ con el anuncio del nacimiento del SeƱor con la lectura del antiguo texto de las Calendas y siguiĆ³ con un homenaje floral ante la imagen del NiƱo JesĆŗs realizado por varios niƱos de diferentes naciones.



Concluida la misa, las miles de personas que acudieron a la basƭlica contemplarƔn en el centro de la plaza de San Pedro el Portal de BelƩn levantado delante del obelisco.



El Nacimiento cuenta con una veintena de figuras, todas a tamaƱo natural, provenientes del Portal de BelƩn que fue realizado en 1842 en la iglesia romana de San AndrƩs della Valle por San Vicente Palotti.



Antes de la Misa del Gallo, a media tarde, Benedicto XVI encendiĆ³ el Cirio de la Paz en la ventana de su apartamento.



Benedicto XVI volverĆ” maƱana al templo vaticano para leer desde el balcĆ³n central de la logia de la basĆ­lica vaticana el Mensaje de Navidad e impartir la bendiciĆ³n Urbi et Orbi (a la ciudad de Roma y a todo el mundo

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